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Va a juicio el Gitano del escándalo

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El escándalo estalló hace justo dos meses, en pleno Palermo. Fue cuando un hombre de la comunidad gitana que salía junto a varios familiares de una fiesta de 15, chocó de contramano en la entrada del Circuito KDT. Y sus familiares amenazaron a periodistas que cubrían la noticia en vivo. Ahora, la Cámara del Crimen lo excarceló pero ordenó que se realice un juicio oral. En el fallo, quedó confirmado que el hombre iba borracho y drogado y en su auto de lujo llevaba dos armas, joyas y siete millones de pesos.

Todo ocurrió en la madrugada del 20 de marzo y el protagonista fue Jorge Luis Miguel. La Sala Cuarta de la Cámara, con las firmas de los jueces Alberto Seijas, Mariano González Palazzo y Carlos González, confirmó su procesamiento -dictado en primera instancia por el magistrado Luis Zelaya- y lo liberó bajo una fianza de cien mil pesos.

Miguel fue procesado por los presuntos delitos de «lesiones graves cometidas con dolo eventual y portación de arma de fuego de uso civil condicional sin la debida autorización legal». Según describe el fallo, ese día el gitano manejaba su BMW «excediendo ampliamente la velocidad reglamentaria permitida y bajo los efectos de alcohol y estupefacientes», y tomó a contramano la rotonda de Salguero en la entrada al Circuito KDT.

El tribunal confirmó el procesamiento, pese a que el imputado argumentó que se confundió en el sentido de circulación por la mala señalización vial y, sobre las armas, justificó que «en dos ocasiones integrantes de su familia habían sido secuestrados por personal policial».

Miguel, que tiene antecedentes por robo a mano armada y resistencia a la autoridad, entre otros delitos, afrontará un proceso oral y público por «lesiones culposas agravadas, en concurso real con portación de arma de fuego de uso civil condicional sin la debida autorización legal, atenuada por su condición de legítimo usuario». En aquel momento su abogado había asegurado que las armas estaban registradas.

Miguel, quien dijo vivir en Colonia Liebig, partido de Ituzaingó, provincia de Corrientes, fue excarcelado mediante una fianza de cien mil pesos «más la obligación de presentarse quincenalmente ante el juzgado» y «la prohibición de salida del país».