Desde ahora, el ícono de Puerto Madero es considerado «Monumento». Así lo votó la Legislatura porteña, que declaró al puente diseñado por el arquitecto valenciano Santiago Calatrava como Patrimonio Cultural de la Ciudad de Buenos Aires.
La iniciativa fue de los diputados socialistas Roy Cortina y Hernán Arce, que encuadraron al puente en la Ley 1.227 de Patrimonio Cultural. Esta norma, permite declarar como «monumentos» a aquellas «obras singulares de índole arquitectónica, ingenieril, pictórica, escultórica u otras que sobresalgan por su valor arquitectónico, técnico, histórico, social o artístico, vinculado a un Entorno o Marco Referencial, que concurra a su protección».
El Puente de la Mujer lleva ese nombre porque está en un barrio que tiene a mujeres destacadas como nombres de sus calles. Fue la primera obra de Santiago Calatrava en América Latina y representa a una pareja bailando tango. El mástil, cuyos 39 metros se proyectan hacia el cielo en diagonal, hace las veces del hombre. Los brazos de éste son los 19 tensores del puente peatonal, que con una leve curva simboliza al cuerpo femenino.
Pero este puente, también es una gran obra de ingeniería. Un mecanismo de 20 motores permite que la enorme estructura de 172 metros de largo y 800 toneladas gire sobre un eje situado debajo del mástil, permitiendo el paso de las embarcaciones que circulan por el dique.
El ahora monumento también esconde una historia. La de Alberto González, el empresario que mandó construirlo. González había trabajado en los estudios Lumiton y, más adelante, se destacó en la distribución de películas. Años más tarde fue el dueño de Imagen Satelital, una empresa que reunía a las señales de TV por cable Space, Infinito y Uniseries. Después la vendió y, a los 70 años, se dedicó a algo nuevo para él: el desarrollo inmobiliario. Y desde su nuevo rol propulsó la transformación del Dique 3 de Puerto Madero. El puente que encargó fue uno de sus grandes aportes al barrio. Pero no llegó a verlo: murió la noche anterior a que montaran el puente.
La inauguración oficial fue en un día que trae malos recuerdos: el 20 de diciembre de 2001. No hubo pompa: al mismo tiempo, la crisis estallaba y -muy cerca del puente- cinco personas eran asesinadas por la represión policial en Plaza de Mayo.
Hace 17 años el Puente de la Mujer se convirtió en una postal de la Ciudad y en un monumento por derecho propio. Pero ahora este título, ya es oficial.
Facebook
Twitter
RSS