Los manteros de la zona de Flores volvieron al cruce de las avenidas Avellaneda y Nazca. Esta vez no intentaron ubicar una carpa, sino una olla popular. El grupo de manteros exige un espacio fijo para la venta de sus artículos, denuncian la existencia de «mafias» que no les permiten trabajar y alegan un trato desigual por parte del Gobierno porteño.
«Esta mañana se pidió permiso administrativo para instalar una carpa en avenida Avellaneda. El Ministerio de Espacio Público porteño lo denegó. De todas formas, el Gobierno no puede desconocer nuestro derecho a expresarnos«, dijo Omar Guaraz, titular de la agrupación Vendedores Libres
«Hasta que el Gobierno no se haga presente, no respete los acuerdos y deje de acordar con la verdadera mafia organizada del Once, vamos a seguir acá«, advirtió el representante de los manteros
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