A pesar del reclamo de un grupo de vecinos y de vecinas, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires habilitó este espacio dedicado a mascotas, ubicado en Heredia y Charlone, en Villa Ortúzar.
El canil tiene piso de césped sintético y varias atracciones para mascotas. Entre las rejas, hay paredes de material con tres murales de mosaicos hechos por Osky Di Biase.
“Uno de cada dos hogares porteños tiene una mascota y es en los caniles donde se promueve la socialización, ejercitación y disfrute en un área al aire libre. Por eso es muy importante sumar a los espacios verdes infraestructura de uso exclusivo para que nuestros vecinos lleven a sus mascotas y puedan compartir un momento recreativo de forma segura”, señaló Julia Domeniconi, secretaria de Atención Ciudadana y Gestión Comunal de la Ciudad.
En este lugar, funcionaba El Galpón de Ortúzar, un espacio comunitario gestionado por gente del barrio y distintas organizaciones. En abril de este año el Gobierno autorizó su demolición y la posterior construcción del canil.
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