
Miles de personas que estacionan sus autos cada día en el Microcentro tienen, desde hace algunas semanas, un obstáculo más: la obtención de fichas para los parquímetros. Los kioscos cuentan con pocos cospeles y los automovilistas deben hacer malabares para conseguir monedas. Además, se suman las quejas por el mal funcionamiento de algunas tickeadoras.
En barrios como San Telmo o Recoleta, donde funciona el sistema de estacionamiento medido, los automovilistas corren de kiosco en kiosco para comprar cospeles. “Yo trabajo en Defensa y Moreno y en los kioscos de la zona no hay o te venden de a dos porque dicen que no les entregan”, indicó Ernesto Spina, un oficinista que estaciona a diario en el Microcentro.
“Esto termina complicando la jornada laboral porque uno tiene que pedir permiso para salir a cada rato a ver si consigue; se transforma en un problema”, añadió. A Gabriela Durand, que trabaja en Bolívar y Venezuela, le sucedió lo mismo: “El kiosquero me dice que le están entregando la mitad, porque aparentemente algunos expendedores se las están guardando por el aumento”.
Se refiere al incremento del 33% anunciado para este mes, que lleva la ficha de $3 a $4. “Lo que estoy haciendo es juntar todas las monedas que puedo, pero es imposible. Fijate que un trabajador está por lo menos ocho horas, con lo cual necesita 24 pesos de monedas todos los días”, señaló la mujer.
Por su parte, el Ente Regulador de la Ciudad expuso su versión: “A raíz de las denuncias recibidas por el ente en los últimos días, se puede presumir que en la zona sur (donde el servicio lo presta la empresa BRD) existe un faltante de cospeles en los comercios, no así en la zona norte (donde se hace cargo la firma DAKOTA)”. Consultado por el motivo, el organismo aseguró desconocer las causas del déficit actual e insistió con que a mediados del año pasado, cuando se anunció que el cospel aumentaría de $1,40 a $3 (un 114 por ciento), los comercios o las empresas proveedoras “los acaparaban para sacar provecho”.
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