Alrededor de 16 internos del Instituto de Menores Manuel Rocca, a los que luego se sumaron unos 30 más, iniciaron el sábado un confuso motín con toma de rehenes en el centro de detención.
Amenazaron a los guardias con armas blancas. La Policía Federal montó un megaoperativo de seguridad con 200 efectivos en las puertas del instituto ubicado en el barrio porteño de Floresta.
El motín fue iniciado por un grupo de 16 menores de “extrema peligrosidad” que tomó de rehenes a otros 30 internos del penal, según informaron fuentes policiales.
El motín se inició el sábado pasadas las 22:30. El objetivo del grupo de 16 internos del penal de menores era escapar, aunque otra de las versiones señala que se trató de un reclamo por mejores condiciones de detención.
Con la llegada de los familiares a las puertas del instituto la situación empeoró. Incluso, hubo un principio de incendio a raíz de la quema de colchones.
La versión oficial señala que no se trató de un reclamo por mejores condiciones de detención, sino que fue un claro intento de fuga. De hecho, una vez finalizado el motín que se prolongó por unas diez horas, las autoridades ingresaron al instituto y encontraron graves destrozos y sectores incendiados.
El megaoperativo de la Federal se montó en los alrededores, con el objetivo de impedir la fuga de los menores. Según advirtió la fuerza de seguridad, se vivieron momentos de tensión en horas de la madrugada, y pasadas las 8:30 ya había sido controlado.
Los internos, de entre 16 y 17 años, agredieron a los guardias con armas blancas, en su mayoría elementos de cocina. En total, el hecho dejó un saldo de seis heridos, de los cuales la mayoría son jóvenes. Ahora, la preocupación es por relocalizar a los menores detenidos a otros centros.
Facebook
Twitter
RSS