Hace dos meses y medio, la Plaza del Congreso fue destrozada durante las violentas manifestaciones contra la reforma previsional. Ahora, ya luce como antes del 18 de diciembre pasado, luego de un trabajo de restauración «artesanal» que le costó a la ciudad de Buenos Aires alrededor de 23 millones de pesos. Este miércoles a las 12, el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta encabezó el acto de reinauguración.
«Estamos haciendo un gran esfuerzo para recuperar la Plaza del Congreso. Ya reparamos el sistema de riego y estamos trabajando en los bancos y en las glorietas, que son de principios del siglo XX y fueron destruidas», había dicho a Télam hace dos semanas, el ministro del área, Eduardo Macchiavelli.
Fueron reparados todos los pisos, se limpiaron los grafitis y arreglaron los bancos parcialmente rotos y se colocaron nuevos para reemplazar los que los manifestantes destruyeron por completo.
También se completó la pintura de los cestos vandalizados y se repusieron el sistema de riego, los panes de césped y el resto de las plantas que habían quedado marchitas.
Además, se recuperó la fuente de la Plaza Moreno y los centenarios odeones (glorietas) de la Plaza del Congreso, de cuyas 200 columnas se colocaron 30 y otras 150 fueron re elaboradas.
«Las tareas sobre las glorietas son las que dieron más trabajo, ya que se hacen de forma casi artesanal, con mucho detalle y cuidado, por eso lleva más tiempo», había asegurado Macchiavelli.
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