La Red de Expresos Regionales (RER) fue presentada en plena campaña electoral del año pasado. En el Gobierno Nacional aseguran que se licitará en el segundo semestre y que comenzará antes de fin de año. En el macrismo, tanto en la Nación como en la Ciudad, no dudan en considerarla «la mayor obra de transporte público en la historia de la ciudad«.
Se trata de un megaproyecto. La idea es construir tres túneles que partan desde Constitución, Once y Retiro y se unan en una gran estación central debajo del Obelisco. Así, la gente podría viajar desde el sur al norte del Conurbano, por ejemplo, sin cambiar de tren, o bien podría llegar directo al Microcentro. Los beneficios serían múltiples: bajarían los tiempos de viaje, entrarían menos autos a la Ciudad y se reduciría la contaminación, entre otros.
En total serán 16 kilómetros de túneles. La obra costaría 1.800 millones de dólares, que se financiarían mayormente con créditos internacionales, y que tardaría al menos ocho años. El primer tramo será el del sur, para que el ferrocarril Roca llegue hasta el Centro.
El túnel estaría en un tercer subsuelo, debajo del Metrobus de la 9 de Julio, la terminal de combis y el subte, respectivamente. La estación central ferroviaria estaría conectada con todos esos transportes.
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