Es el que une la Av. Figueroa Alcorta con la Facultad de Derecho – en Recoleta -, uno de los más transitados en la Ciudad de Buenos Aires.
El Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana porteño estuvo a cargo de la puesta en valor que incluyó la renovación de 700 m2 de la carpeta peatonal con hormigón alisado, el recambio a LED de las luces instaladas debajo del puente, la reparación de 100 m2 de las veredas del entorno y la colocación de una nueva rejilla del desagüe.
«Continuamos trabajando a diario para construir una Ciudad a escala humana, con esta obra generamos un espacio público de disfrute más seguro para los vecinos y vecinas”, expresó la ministra, Clara Muzzio.
Este puente presentaba fisuras y filtraciones causadas por el desgaste natural del uso y del tiempo. Además, la única rejilla de desagüe que tenía estaba obstruida.
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