
Un abogado de 61 años fue encontrado hoy asesinado, con sus manos y pies atados y una bolsa en la cabeza en su estudio jurídico del barrio porteño de Monserrat, donde los investigadores se hallaban trabajando en busca de rastros.
El hecho fue descubierto cerca de las 10 de esta mañana en el departamento 1 del sexto piso de un edificio de la calle Santiago del Estero 286, en el barrio de Monserrat, a sólo tres cuadras de donde el domingo fue encontrado el cadáver del «arbolito» Nicolás Silva, que estaba desaparecido desde el 4 de octubre último.
Los investigadores identificaron al abogado asesinado como Armando Jesús Bautista (61), cuyo cadáver fue encontrado desnudo, tirado en un dormitorio, con sus manos y sus pies atados y con su cabeza tapada con una bolsa.
El cuerpo fue encontrado por la pareja del abogado, quien llegó hasta el estudio jurídico porque no tenía noticias de él desde ayer domingo, indicaron las fuentes.
Según relató a los investigadores la pareja de Bautista, el domingo por la tarde le dijo que tenía que ir al estudio a buscar unos papeles para una audiencia importante que tenía programada para hoy. Sin embargo, Bautista no regresó a su casa, por lo que su pareja decidió ir a buscarlo esta mañana al estudio, y se encontró con el cuerpo. La pareja de Bautista llamó inmediatamente a la policía, por lo que efectivos de la comisaría 4a. se dirigieron al lugar y constataron la muerte.
Los peritos policiales trabajaban en el lugar en busca de rastros del homicida e intentaban establecer si hay algún faltante en el estudio jurídico, adonde se presentó el fiscal de instrucción porteño Sandro Abraldes, que también a cargo la investigación por el hallazgo del cadáver del «arbolito» Silva.
Se trata de Olga Heinse, quien esta mañana aseguró que su socio el abogado Armado Jesús Bautista (61) había concurrido ayer al estudio de la calle Santiago del Estero 286 para «buscar unas carpetas para trabajar», como era habitual cuando tenían muchas causas en trámite.
«Él venía a buscar unas carpetas para trabajar en mi casa, pero nunca llegó a mi casa. Como no venía, yo lo llamé a su casa y me atendió su pareja, quien me dijo que había salido. En ese momento pensé que le había salido otro programa, pero jamás que pudiera haberle pasado algo así», dijo Heise en la puerta del estudio donde esta tarde trabajaban los peritos policiales en busca de rastros.
La letrada confirmó que si bien el edificio cuenta con cámaras de seguridad que registran el ingreso de las personas, las mismas no estaban en funcionamiento al momento del hecho, y dijo que el estudio no tenía la puerta forzada, por lo cree que el que ingresó era alguien de confianza para el abogado Bautista.
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