La instalación de cámaras para multar a los vehículos que circulan por zonas no permitidas demostró ser un éxito en el Microcentro, donde la cantidad de infractores bajó más de la mitad. Ahora el Gobierno quiere llevar esta herramienta a más lugares: desde mediados de marzo controlarán con fotomultas a los carriles exclusivos de la avenida Córdoba, para que sólo lo use el transporte público.
Los carriles funcionan desde la calle 25 de Mayo hasta la avenida Medrano. Son 4,4 kilómetros donde las dos vías de la derecha están reservadas para 13 líneas de colectivos, los taxis que lleven pasajeros y los patrulleros o vehículos de emergencia. De lunes a viernes de 8 a 20 no pueden usarlo los autos particulares. Pero es normal que algunos vehículos no respeten esta restricción, y así el tránsito se entorpece.
Desde fines del año pasado el Gobierno porteño está repavimentando toda la traza e instalando un cordón amarillo de 40 cm. para separar físicamente el tránsito, además de mejorar las señales y reubicar cada tres cuadras las paradas que usan los 4.000 colectivos que cada día pasan por la avenida. En ese tramo de Córdoba circulan también unos 25.000 autos, incluyendo los taxis.
Pero estas mejoras vendrán acompañadas por el control. Al igual que en el Microcentro, la Ciudad instalará cámaras programadas para sacar fotos de las patentes de los vehículos. Esas imágenes será enviadas luego al centro de control del Cuerpo de Agentes de Tránsito, que evaluará la infracción. La multa por invadir carriles exclusivos es de 140 unidades fijas, que hoy equivalen a $ 1.456. El sistema de control con cámaras también se usa en los circuitos del Metrobus.
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