El agua sorprendió a todos. Como una fuente sin cauce, esta mañana transformó en un lago el cruce de la avenida Figueroa Alcorta y la calle La Pampa, en el límite entre Palermo y Belgrano.
Una rotura de un caño de un metro de diámetro fue el causante del manantial inesperado, a metros de la planta de tratamiento de agua corriente de la Capital Federal.
En el lugar, trabaja personal de la empresa Agua y Saneamientos Argentinos (AySA). La estructura funciona como un distribuidor de la red de agua corriente de la zona.
Voceros de la compañía dijeron que todavía no hay una estimación del tiempo que demorará la reparación, aunque aseguraron que el problema quedará solucionado durante el transcurso del día.
El anegamiento generó complicaciones para circular y obligó a las autoridades de Tránsito de la Ciudad a desviar la circulación en un tramo de Pampa, entre Figueroa Alcorta y Cazadores.
Facebook
Twitter
RSS