POR DIEGO GARCIA SAEZ. Epa! no vas muy rápido Horacio se preguntan algunos, aunque otros se atreven a soñar despiertos junto a él. Algunos periodistas aseguraron que se lo escuchó decir esta semana a sus colaboradores más cercanos que será Presidente de la Argentina en el 2023 y que por eso quiere obras y presupuesto para quedar en la historia de la Ciudad.
Aunque todavía falta mucho, Horacio Rodríguez Larreta a dos meses de haber asumido como Jefe de Gobierno Porteño muestra y habla de su gestión todo el tiempo. Desde el propio riñon informativo de los medios con los que cuenta la Ciudad de Buenos Aires quieren pisar el acelerador. Por eso tanto en la Radio de la Ciudad, la página web del GCBA y el Canal de la Ciudad plantearán mediaticamente la gestión de Larreta.
Eso sumado a las apariciones del Jefe de Gobierno Porteño, que no lo muestran por ahora en grandes obras, sino en contacto con los vecinos y junto a los Comuneros. Algunos «genios» de la prensa de Larreta te aseguran que el contacto con los vecinos y de Horacio caminando los barrios «garpa» mucho.
Dentro de este relato mediático, la figura de Diego Santilli como Vicejefe de Gobierno parece por ahora quedar como a un costado. Todo lo contrario a lo que ocurria cuatro años atrás cuando era la propia Maria Eugenia Vidal quien encaraba a los periodistas para responder a todos los temas algunos agradables y otros más complicados como la toma del Indoamericano y traspaso de los subterráneos.
Larreta tampoco quiere confrontar. No le interesa. Solo quiere grandes obras que le faciliten las cosas. El aumento del ABL y las patentes ya fue digerido por los porteños y hasta casi pasó desapercibido. Por eso con un 40 % de recaudación más para los próximos meses habrá grandes anuncios. Además de alguna posibilidad de toma de créditos para obras.
Eso sumado a que Horacio presionó para se le duplicara el porcentaje de coparticipación a la Ciudad con un decreto que no cayó nada bien ente los gobernadores.
La inisitencia del jefe de Gobierno para que le habiliten dos obras con las que sueña quedar en la historia de la Ciudad ya está casi lista: la construcción de una megaestación debajo del Obelisco y la realización de la postergada Autopista Ribereña.
Con la imagen intacta, sin casi oposición de un Peronismo que no «calienta» nada, los días de Horacio pasaron a ser un paraíso. Primero irá por la reelección en la Ciudad de Buenos Aires y luego por el sueño más grande: Presi-2023
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