Desde que denuncia la trata de personas y la explotación laboral, Gustavo Vera recibió amenazas de todo tipo: llamados intimidatorios, ataques a golpes y hasta planes para terminar con su vida. Pero esta semana sufrió tal vez la que sea la más rara de todas: el robo de su bicicleta playera en la esquina de la Legislatura porteña.
El lunes, el titular de la ONG La Alameda llegó a trabajar al edificio del Poder Legislativo porteño en su sencilla bicicleta playera azul. Como solía hacerlo cada vez que la llevaba al centro, la dejó atada en el cruce de Perú y Diagonal Sur. Para asegurarla, la sujetó con una gruesa cadena a las rejas de la boca de la estación Bolívar del subte E.
Cuando salió de trabajar, su bicicleta ya no estaba. En el lugar hay cámaras de seguridad. Ese día además había efectivos de la Policía Federal, la Metropolitana y la Gendarmería por el recuento de votos del ballottage que comenzaba a realizarse en el edificio de la Legislatura. Pero nada de eso impidió que se la llevaran.
Pidió entonces las grabaciones de seguridad para ver qué había pasado. En la filmación, se ve cómo deja su bicicleta a las 13:30. Tres minutos después, un hombre alto, rubio y vestido con un traje se acerca para sacarle fotos. A las 16:03, otros dos desconocidos se acercaron a la boca del subte y sacaron unas tenazas de una mochila para cortar la cadena. Mientras uno operaba, el otro lo cubría con otra bicicleta que habían traído.
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